Preguntas frecuentes sobre el acné en la adolescencia

Sabemos que el acné es un tema que afecta y preocupa mucho a los adolescentes y sus familias. Por lo tanto, en esta oportunidad buscaremos responder algunas preguntas frecuentes sobre este asunto, a la vez que brindaremos información relevante sobre cómo tratar esta enfermedad.

 

¿Qué es el acné?

Es una enfermedad cutánea crónica inflamatoria de la unidad pilo-sebácea, de etología multifactorial, caracterizada por un aumento de la secreción sebácea, formación de comedones, colonización por Cutinebacterium Acnes, lesiones inflamatorias y riesgo de secuelas cicatrizales.

Es una de las enfermedades dermatológicas más frecuentes sobre todo en la adolescencia, debida a la acción de los andrógenos, con una forma de expresividad clínica heterogénea y polimorfa.

La máxima prevalencia e intensidad se produce alrededor de los 14-15 años en la mujer y entre los 16 a 18 años en el varón. Si bien la incidencia por sexos es similar, en el varón se observan formas más graves.

Esta enfermedad crónica impacta en la calidad de vida de los adolescentes, sobre todo en la esfera psico-social, determinando depresión, ansiedad y trastorno de su imagen corporal. El rol del pediatra o médico referente es de relevancia para realizar una orientación diagnóstica, terapéutica precoz, seguimiento, acompañamiento y para determinar la derivación oportuna al especialista en Dermatología en caso de que lo requiera.

¿Cómo se realiza el diagnóstico?

El diagnóstico es clínico, constatando la presencia de comedones y/o lesiones inflamatorias (pápulas, pústulas y quistes). Pueden estar acompañados de cicatrices. Estas se encuentran presentes principalmente en cara (90%), pero se pueden extender a tronco (20%) y dorso alto (60%).

Dentro de la anamnesis es importante conocer: edad de inicio, duración, cambios en las lesiones, tratamientos previos y su efectividad, así como el impacto de esta enfermedad en su calidad de vida.

 

 

En su abordaje diagnóstico se deben considerar 4 aspectos fundamentales: tipo de lesión que predomina (inflamatorio o no inflamatorio), intensidad/gravedad (estadio de las lesiones), extensión (facial, pectoral, espalda) y factores asociados.

La clasificación es clínica:  acné leve (comedones), acné moderado (lesiones inflamatorias más pápula y pústula) y acné severo (predominan las lesiones inflamatorias, nódulos, quistes y cicatrices).

 

¿Cuándo derivar a Dermatología?

  • Acné que se presenta en la infancia.
  • Acné moderado que no ha respondido a tratamientos bien conducidos.
  • Acné severo.

 

¿Cuáles son los factores que se relacionan con episodios de exacerbación del acné?

  • Las dietas con alto contenido de azúcar y otros hidratos de carbono estimulan la insulina sérica y los factores de crecimiento similares a la insulina (IGF-1) determinando el aumento en la producción de andrógenos y posterior desarrollo del acné.
  • Situaciones de estrés determinando el aumento de la secreción suprarrenal de andrógenos y estimulando la regulación neuroendocrina de los sebocitos.
  • Fármacos: esteroides anabolizantes o anticonceptivos con progestágenos con acción androgénica.
  • Cosméticos de alto contenido graso, limpiadores agresivos, jabones con ph alcalino que alteran la barrera cutánea y favorecen la formación de comedones e inducen inflamación.

 

¿Qué avances hay en el tratamiento?

Los continuos avances en la patogenia del acné han permitido el desarrollo de nuevas pautas terapéuticas. El goldstandar sigue siendo la entrevista clínica junto a una correcta exploración física para organizar un plan terapéutico apropiado e individualizado a cada adolescente, siempre teniendo en cuenta el impacto que genera en su calidad de vida.

El abordaje es interdisciplinario y requiere fortalecer el autocuidado, lograr adherencia al tratamiento y el seguimiento periódico de la evolución.

 

 

 

Los lineamientos básicos del tratamiento son:

  • Higiene adecuada, una o dos veces por día con jabones ph neutros o ácidos, no irritantes, previo al tratamiento farmacológico tópico o sistémico.
  • Se recomienda la foto protección de la zona para evitar marcas y cicatrices, si es posible con foto protectores específicos para pieles grasas.
  • Se recomienda suspender el tratamiento tópico en los meses de verano.
  • No manipular las lesiones.
  • Tratar desde el inicio, cuando consulte el adolescente.
  • Individualizar y adecuar el tratamiento al tipo, extensión y gravedad del acné.
  • Explicar claramente eficacia y efectos adversos del mismo.

 

 

La Academia Americana de Dermatología y las guías europeas recomiendan:

terapia combinada en todas las formas de acné y que los retinoides tópicos solos o combinados con peróxido de benzoilo (PBO) o antibióticos tópicos son el tratamiento inicial para las formas leves/moderadas y la opción más utilizada como mantenimiento en todas las formas de acné.

 

¿Con qué fármacos contamos en Uruguay y cuáles son sus indicaciones?

 

  1. Tratamiento tópico:

 

Retinoides: son comedoliticos y anticomedogénicos, tienen efecto antiinflamatorio y normalizan la queratinización. Opciones: Adapalene 0,1 -0,3%, Tretinoina 0,025%, 0,05%.

 

PBO 5-10%: actúa como antibacteriano, antinflamatorio, comedolitico y queratolitico. Su uso es recomendado combinado con retinoides, no en monoterapia.

 

Antibióticos tópicos (ATB): Actúan por su efecto antiinflamatorio e inhiben el crecimiento de Cutinebacterium acnes. Se recomienda utilizar: Eritromicina 1-2% y Clindamicina 1-2% (no en monoterapia, siempre combinado con retinoides).

 

Ac Azelaico 15%: Actúa como antiinflamatorio y disminuye la queratinización del folículo y la hiperpigmentación.

 

En Uruguay existen preparados comerciales tópicos que combinan estos fármacos: retinoide/PBO; retinoide/ATB; PBO/ATB.

 

 

  1. Tratamiento sistémico:

 

Antibióticos orales (ATB): Doxiciclina, minociclina y limeciclina. Se usan en pulsos de 15 días -1 mes.

Tratamiento hormonal: anticonceptivos orales. Isotretinoina oral.

 

  1. Otros tratamientos:

 

Como tratamientos coadyuvantes se pueden realizar: extracción de comodones, empleo de peelings químicos o uso de láser.

 

 

Según la severidad se puede recomendar:

 

Acné leve: tratamiento tópico: retinoide acompañado de PBO o ATB tópico si existen lesiones inflamatorias.

 

Acné moderado: tratamiento tópico combinado con ATB vía oral en los empujes.

 

Acné severo: ATB vía oral, valorar terapia hormonal (en mujeres) y el uso de isotretinoina.

 

 

 

Bibliografía:

 

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Dra. Agustina Acosta. Ex Asist. Cátedra Dermatología. Unidad Dermatología Pediátrica. CHPR.

Dra. Loreley García. Prof. Pediatría. Clínica Pediátrica B. Depto. Pediatría. Facultad de Medicina. UDELAR.