Enfermedad renal en la infancia: actuar temprano para prevenir

¿Es importante prevenir la enfermedad renal en el niño?

La preservación de la función de los riñones es un aspecto importante para lograr la salud integral del niño y alcanzar el crecimiento y desarrollo adecuado, que los prepare para su inserción en la sociedad.

Los riñones actúan extrayendo productos no deseables del organismo. El fracaso de su función lleva a la acumulación de estos productos con efectos desfavorables sobre la salud y el crecimiento del niño.

Son muchas la enfermedades que pueden sufrir los riñones, y debemos buscar medidas para prevenir o detectar precozmente las alteraciones del aparato urinario, ya desde el embarazo.

Las infecciones urinarias son frecuentes en la infancia. Algunas veces pueden ser la manifestación de la presencia de malformaciones urinarias que deben ser detectadas y tratadas para prevenir el daño renal.

Muchas veces, la enfermedad renal es silenciosa y puede avanzar sin producir síntomas, manifestándose tardíamente en la edad adulta, y por eso hay que buscarla desde temprano.

¿Cuántos niños y adolescentes sufren enfermedad renal grave en nuestro país?

La falla total en la función se denomina insuficiencia renal extrema, y requiere en forma imprescindible el tratamiento con diálisis o el trasplante para mantener la vida. Aproximadamente, cinco niños y adolescentes nuevos por año requieren diálisis o trasplante en Uruguay.

En nuestro país, 269 niños y adolescentes requirieron diálisis desde el año 1980 a la fecha. En tanto, los niños y adolescentes trasplantados renales desde 1979 a la fecha fueron 87.

Existen enfermedades que pueden detectarse previo al nacimiento y otras posteriormente, pudiendo conducir a una falla de grado variable en la función de los riñones, por ejemplo:

– El reflujo vesicoureteral (reflujo de orina desde la vejiga a los riñones) ocurre en el 1% de los niños, siendo más frecuente en los niños pequeños con infección urinaria.
– La dilatación de las vías urinarias (hidronefrosis) en el feto, se detecta en entre el 1% y el 3% de los embarazos, pudiendo corresponder en algunos casos a malformaciones de los riñones y/o de las vías urinarias.
– La espina bífida se encuentra en el 0,7% de los recién nacidos y puede ocasionar enfermedad renal por afectación de la vejiga.

¿Qué medidas o controles podemos realizar en niños y adolescentes para diagnosticar una enfermedad renal oculta?

La prevención de la enfermedad renal en pediatría comienza antes de la concepción, con un tratamiento adecuado con ácido fólico que reduce la frecuencia de malformaciones, tales como la espina bífida. También evitando, en la madre, ciertos medicamentos que están contraindicados en el embarazo.

Es importante el control del embarazo, realizando los estudios indicados que tienden a evaluar el crecimiento y la salud del feto.

El parto asistido en un centro asistencial garantiza una buena atención del recién nacido, le asegura un control adecuado y bienestar. Cualquier daño en algún órgano puede repercutir en todos los demás, entre ellos los riñones.

Los controles periódicos del niño con el pediatra permiten detectar y tratar en forma precoz enfermedades que afectan los riñones.

La hipertensión arterial puede ser causada por enfermedad renal y se encuentra aun en los niños más pequeños. Su frecuencia aumenta en niños y adolescentes con sobrepeso. Por ello es importante el control regular de la presión arterial.

Hay enfermedades renales que son hereditarias (poliquistósis renal, reflujo vésicoureteral, malformaciones renales, enfermedad de Alport). Si en la familia hay padres, abuelos, tíos o primos con problemas renales, se debe comunicar esa situación al pediatra. Estas enfermedades deben buscarse en todos los niños de la familia, aunque parezcan estar sanos. Es importante que los padres comuniquen al pediatra estos antecedentes.

Las malformaciones renales son la causa más frecuente de diálisis y trasplante renal en niños. Aquellos que presentan malformaciones deben controlarse con nefrólogo y urólogo
infantil.

¿Cómo podemos prevenir la enfermedad renal en niños y adolescentes?

Las medidas a tener en cuenta son fáciles y están al alcance de todos. Solo debemos conocerlas:

. Ingesta abundante de agua (no de refrescos).
. Alimentarse con poca sal, hábito que debe ser compartido por todo el núcleo familiar.
. Alimentación completa, variada, frutas y verduras, evitando la obesidad.
. Evitar el abuso de analgésicos.
. Consultar si el niño se orina de día después de los tres años.
. Consultar si hay familiares directos (padres o hermanos) en diálisis o trasplante.

Es importante seguir las indicaciones del pediatra y hacer al niño los estudios que se solicitan.

La salud integral de niños y adolescentes está a cargo del pediatra tratante, quien es el referente fundamental y el que valora al niño globalmente. El pediatra va a controlar el crecimiento y desarrollo, y también la aparición de cualquier síntoma que se aleje de lo normal.

Si el niño tiene una enfermedad renal crónica, deberá controlarse regularmente con el nefrólogo.

Actividades del Día Mundial del Riñón 2016

1- Se realizará la actividad central el 10 de marzo en el hall del hospital Pereira Rossell, desde las 9 a las 12 horas, con entrada por la calle Lord Ponsonby. La misma contará con:

  • Entretenimiento para niños
  • Toma de presión arterial a niños
  • Educación para una vida saludable

2- Videoconferencia para médicos de toda Latinoamérica.

Será el 10 de marzo, de 19 a 21 horas. Se realizará en el hotel NH Columbia de Montevideo. Tema: “Enfermedad renal en niños. Detección temprana y prevención”.

Contará con la presencia de invitados extranjeros.