Recomendaciones ante el aumento de infecciones respiratorias en niños, niñas y adolescentes

 En Uruguay se constata actualmente un aumento de la circulación de virus respiratorios estacionales. Entre ellos se encuentran el virus sincicial respiratorio (VRS), influenza (virus de la gripe), adenovirus, parainfluenza, SARS-Cov2, entre otros. Si bien son virus que típicamente circulan en meses fríos, en los últimos años se ha extendido el período de su circulación, iniciando antes y continuando hasta el fin de la primavera.

 

Este año en particular se viene observando un comportamiento especialmente agresivo en cuanto a la incidencia y gravedad de las infecciones respiratorias en la población pediátrica, tanto en bebés como en niños más grandes, y muchas veces previamente sanos. Esto se ve reflejado en el aumento de las consultas pediátricas en todos los niveles de atención.

 

También han aumentado las hospitalizaciones en cuidados moderados y en CTI, con casos graves y fatales, y tanto en pacientes con factores de riesgo como en niños y adolescentes sanos. Ante esta situación, con el objetivo de informar y recordar a la población las medidas de prevención, factores de riesgo y signos de alarma, se establecen las siguientes recomendaciones:

 

  1. Medidas de prevención

Estas enfermedades son muy contagiosas. Los virus respiratorios se transmiten fácilmente de persona a persona, a través de secreciones (gotitas) respiratorias que se emiten al toser o estornudar y por contacto con objetos contaminados.

 

¿Cómo podemos prevenir las infecciones respiratorias en los niños?

 

  • Evitar exponerlos a personas enfermas o con síntomas respiratorios.
  • Alejarlos de sitios con hacinamiento, con gran afluencia de gente y cerrados.
  • Ventilar espacios cerrados.
  • Evitar la exposición a humos y en especial de tabaco.
  • Lavar las manos con agua y jabón antes y después de comer, de atender un enfermo, de cambiar pañales, luego de tocar objetos como teléfonos, celulares, computadoras, carro de supermercado, o después de viajar en autobús, volver de la calle, toser o estornudar.
  • Usar mascarilla si se está con personas que tengan síntomas respiratorios.
  • Al toser o estornudar cubrir nariz y boca con la parte superior del brazo o el codo, y no las manos, si no tiene un pañuelo desechable.

 

 

Cuidados generales 

  • Promover la lactancia materna.
  • Evitar enviar a los niños que se encuentran con síntomas respiratorios o con fiebre a centros educativos, maternales, deportivos. Esto permite disminuir la circulación de los virus respiratorios y evitar que otros niños se contagien.
  • En caso de niños con alguna enfermedad de base que pueda condicionar una evolución más grave frente a un contagio por virus respiratorios, evitar que concurra a centros educativos o maternales durante las semanas de mayor circulación de virus.

 

  1. Mantener calendario de vacunas al día y vacunarse contra la gripe y COVID. 

Las infecciones causadas por virus respiratorios pueden complicarse con sobreinfecciones bacterianas dando neumonía grave, otitis o problemas neurológicos. Por tanto, es muy importante que todos los niños y adolescentes tengan el calendario vacunal al día.

 

Dado que para algunos virus respiratorios hay vacunas que previenen sobre todo las complicaciones, hospitalizaciones y casos fatales, es fundamental vacunarse contra la gripe (en caso de los niños a partir de los 6 meses) y contra COVID (a partir de los 5 años).

 

  1. ¿Quiénes tienen más riesgo de enfermar por virus respiratorios?

Si bien estos virus infectan a personas de todas las edades, se identifican algunas condiciones que aumentan la probabilidad de padecer complicaciones (factores de riesgo) que se detallan a continuación.  Es importante tener en cuenta de todos modos que los niños y adolescentes sanos también pueden presentar infecciones graves y fatales, complicaciones y requerir ingreso hospitalario y en unidades de cuidados intensivos, por lo que es imprescindible poder protegerlos y optimizar las medidas de prevención en especial la vacunación contra influenza y COVID.

 

Grupos de riesgo para infección por Virus Sincicial respiratorio (VRS).

-Edad inferior a 12 semanas.

-Antecedentes de nacimiento prematuro (en particular, de menos de 32 semanas).

-Enfermedades cardiopulmonares subyacentes (incluida la displasia broncopulmonar y las cardiopatías congénitas hemodinámicamente importantes).

-Niños y adolescentes con trastornos neuromusculares.

-Niños y adolescentes inmunodeprimidos.

 

 

 

 

 

Grupos de riesgo para infección por virus influenza (gripe).

  • Niños menores de 5 años, en especial los menores de 2 años.
  • Adultos mayores de 65 años.
  • Personas con condiciones médicas que incluyen: enfermedad inmunodepresora, asma, enfermedades neurológicas, en especial neuromusculares, enfermedad pulmonar crónica, enfermedades del aparato cardiovascular, enfermedades hematológicas, diabetes, enfermedades renales y hepáticas, trastornos metabólicos, menores de 19 años que reciben tratamiento prolongado con ácido acetil salicílico, niños y adolescentes con obesidad.

 

 

Grupos de riesgo para COVID 19.

-Síndrome de Down.

-Enfermedad pulmonar crónica (asma moderado a severo, bronquiectasias, displasia broncopulmonar, EPOC, intersticiopatías, fibrosis quística, hipertensión pulmonar).

-Enfermedad Renal Crónica en fase terminal.

-Enfermedades neurológicas: epilepsia, enfermedades neuromusculares, enfermedad que alteran la capacidad cognitiva, esclerosis múltiple, enfermedad de Huntington.

-Diabetes.

-Obesidad.

-Inmunodeprimidos: inmunodeficiencias primarias, HIV, enfermedades hematooncológicas: talasemia, enfermedad de células falciformes, personas con trasplante de órgano sólido o de progenitores hematopoyéticos.

-Enfermedad cardiovascular/ cardiopatías.

-Enfermedad cerebrovascular.

-Tuberculosis.

-Enfermedad hepática crónica.

-Enfermedad gastrointestinal crónica.

-Errores congénitos del metabolismo.

 

4.Signos y síntomas para una consulta oportuna

Si bien la mayoría de las infecciones causadas por virus respiratorios no requieren hospitalización, es fundamental que las familias y cuidadores de niños y adolescentes puedan identificar síntomas y signos que pueden estar traduciendo una enfermedad más severa o complicaciones. Estos signos de alarma son:

  • Dificultad para respirar.
  • Respiración más rápida y frecuente de lo normal.
  • Retracción costal (se hunden las costillas o sobre el esternón).
  • Mal aspecto general, sensación de que el niño no está bien, o no mejora.

 

  • Cambios de coloración en la piel (palidez, color morado o aspecto marmóreo).
  • Confusión o desorientación, decaimiento importante, no quiere jugar, no despierta con facilidad.
  • Ruidos al respirar.
  • Rechazo de alimentos: no quiere alimentarse o vomita todo.
  • Fiebre alta, en especial con chuchos o sensación de mucho frío.
  • Síntomas respiratorios en el lactante menor de 3 meses.

 

Ante la presencia de estos signos y síntomas se debe consultar en forma inmediata. 

 

 

Sociedad Uruguaya de Pediatría

15 de junio, 2023